Convulsiones felinas: síntomas y tratamiento
Las convulsiones felinas son síntomas de diversas afecciones y suelen producirse de forma repentina. Si bien puede ser alarmante la primera vez que tu gato tiene una convulsión, intenta mantener la calma y recuerda que el episodio es temporal.
Sigue leyendo para saber más sobre las convulsiones y la epilepsia en gatos, así como consejos para que la experiencia sea menos estresante para ti y para tu mascota.
¿Qué son las convulsiones felinas?
Las convulsiones felinas se manifiestan como comportamientos inusuales, como colapsos, sacudidas, crujir de dientes y temblores.
Durante una convulsión felina, se producen impulsos eléctricos repentinos que alteran los procesos normales del cerebro. Esto puede dar lugar a la estimulación de nervios en otras partes del cuerpo, provocando espasmos y otros comportamientos anormales.
Las convulsiones en gatos son un signo de funcionamiento anormal del cerebro y no son una enfermedad en sí mismas.
Sin embargo, estas crisis también pueden deberse a problemas distintos de las anomalías cerebrales. Los problemas renales, las enfermedades hepáticas o los niveles bajos de azúcar también pueden desencadenarlas.
Existen varias categorías de convulsiones. A menudo, un episodio se considerará generalizado o parcial. Una crisis generalizada afecta ambas mitades del cerebro, mientras que una crisis parcial está relacionada con una región cerebral específica.
¿Qué es la epilepsia felina?
La epilepsia felina es una enfermedad caracterizada por convulsiones que se repiten y son causadas por alteraciones de la actividad cerebral.
Si tu mascota ha experimentado un único episodio en su vida, es poco probable que se le diagnostique epilepsia felina.
La epilepsia en gatos no debe confundirse con la enfermedad genética llamada epilepsia idiopática, que suele afectar tanto a perros como a humanos, pero es una enfermedad bastante rara en felinos.
La epilepsia idiopática en gatos también se manifiesta a través de convulsiones, pero en este caso, no se pueden detectar anomalías en el cerebro ni en ninguna otra parte del cuerpo.
Síntomas de las convulsiones felinas
Los síntomas de una convulsión felina varían en función de la causa y el tipo de episodio.
Las convulsiones generales suelen tener un inicio repentino y durar hasta tres minutos. Su observación puede resultar alarmante, ya que podrían aparecer síntomas como temblores, pérdida de conocimiento, sacudidas o micción.
En comparación con los perros, las convulsiones en gatos de todas las edades suelen ser más parciales que generales. Según la región del cerebro afectada, los síntomas pueden variar considerablemente y ser muy sutiles.
Los síntomas de una convulsión parcial en gatos pueden incluir:
- Movimientos inusuales
- Babeo
- Espasmos faciales
- Girar en círculos persiguiéndose la cola
- Vocalizaciones ruidosas
- Comportamiento agresivo
En ciertos casos, puede ser difícil distinguir los síntomas de las convulsiones felinas de otros signos de comportamiento.
A veces, un episodio puede pasar desapercibido porque los signos son muy leves. Presta atención a síntomas como sed excesiva, cansancio o deambulación constante, ya que pueden preceder a una convulsión felinas.
Si sospechas que hay algo inusual en el comportamiento de tu gato, comunícate con tu veterinario. Si es posible, anota rápidamente la hora del inicio de las convulsiones. Si las convulsiones de tu gato duran más de 5 a 10 minutos, se consideran una urgencia médica. Llama inmediatamente a tu veterinario.
También comunícate con el veterinario para obtener mayor asesoramiento si es la primera convulsión de tu gato, si no ha sido tratado antes por este problema o si tiene múltiples episodios de convulsiones cercanos entre sí, independientemente de la duración de cada episodio.
¿Qué causa las crisis epilépticas en los gatos?
Las convulsiones en los gatos pueden ser un síntoma de muchos problemas de salud diferentes y las causas suelen clasificarse como intracraneales (dentro del cerebro) o extracraneales (debidas a una enfermedad en otra parte del cuerpo).
Entre las causas intracraneales se encuentran la inflamación cerebral, los tumores y los traumatismos. Entre las causas extracraneales se encuentran la ingestión de toxinas, las enfermedades renales y hepáticas, las arritmias cardíacas y la alteración de la regulación del azúcar en sangre, entre otras.
En comparación con los gatos más jóvenes, los gatos mayores tienen más probabilidades de tener un problema de salud concurrente.
De lo contrario, una convulsión podría ser “idiopática”. Esto se diagnostica más comúnmente en gatos jóvenes y el diagnóstico se hace cuando no se identifica una causa subyacente, y la convulsión se produce debido a un mal funcionamiento del cerebro que afecta la neurotransmisión.
Qué hacer si tu gato tiene una convulsión
Si notas que tu gato empieza a tener convulsiones, estas son algunas cosas que puedes hacer para ayudar.
Lleva un registro del tiempo
Intenta anotar cuánto duran las convulsiones de tu gato. Las convulsiones pueden durar desde unos segundos hasta 10 minutos o más, lo cual es una información útil para el veterinario.
Si tienes un teléfono celular a mano, puedes usar un cronómetro como ayuda. Si una convulsión persiste por más de cinco minutos, es motivo de preocupación. En este caso, debes llamar a tu veterinario para recibir asesoramiento de emergencia.
Si la convulsión se detiene después de tres minutos o menos, pide cita con tu veterinario, sobre todo si es la primera vez que notas convulsiones en tu gato.
Reduce los estímulos
Apaga las luces, pero asegúrate de que aún puedas ver con seguridad; para ello, deja una lámpara encendida o mantén la puerta entreabierta con una luz encendida en una habitación contigua.
Todo lo que haga ruido, como la televisión o la radio, debe estar apagado, y todos los presentes deben hablar en voz baja y con calma, dejando al gato mucho espacio.
No muevas ni toques a tu gato
Aunque sea tentador para el dueño de un gato querer ayudar a su mascota durante una convulsión, evita tocarlo a menos que sea absolutamente necesario.
Sin embargo, si corre peligro de hacerse daño al caerse o golpearse contra una superficie dura, lleva a tu mascota a un lugar más seguro. Procura usar una manta para evitar mordeduras o arañazos, ya que estos comportamientos son habituales durante convulsiones incluso en mascotas que normalmente son dóciles.
Llama a tu veterinario si las convulsiones no desaparecen
Una convulsión prolongada de más de cinco minutos es motivo de atención urgente. Haz lo mismo si las convulsiones son frecuentes o si notas que a tu gato le cuesta respirar.
Tratamientos de las convulsiones en gatos mayores
El tratamiento y el plan de manejo de las convulsiones felinas dependerán de la causa subyacente de la convulsión. Aunque la epilepsia idiopática es una causa bastante común de epilepsia en gatos, resulta menos probable en un animal de edad avanzada. Por lo general, la afección se diagnostica mediante un proceso de exclusión de otras causas.
El veterinario deberá realizar un chequeo completo de la salud del gato y recomendar qué pruebas diagnósticas son necesarias. Esto suele implicar análisis de sangre seguidos de una ecografía o una radiografía, o la derivación a un servicio de diagnóstico por imagen avanzado en función de los resultados.
Según el diagnóstico, el veterinario recomendará opciones de tratamiento.
En algunos casos, la causa subyacente de las convulsiones felinas no puede curarse, pero puede tratarse eficazmente.
En ciertos casos, el uso de medicamentos podría ser apropiado, y tu veterinario podría recomendar fármacos anticonvulsivos, ya sea como opción preventiva o para usar en caso de una convulsión prolongada.
Muchos de estos tratamientos requieren controles y monitoreo a largo plazo. Desafortunadamente, una de las causas más comunes de convulsiones en gatos mayores son los tumores cerebrales, que requerirán tratamiento adicional.
Si bien las convulsiones felinas pueden ser alarmantes, intenta no perder la calma. Con los cuidados adecuados, puedes ayudar a proteger a tu mascota y mantenerla lo más cómoda posible.
Para obtener más consejos sobre salud felina, consulta los artículos sobre la salud de los gatos para conocer qué dicen nuestros expertos.