Apoyo a la agricultura regenerativa para una mejor salud del suelo
Comprometidos con la salud de las mascotas y nuestro planeta
Nos preocupamos por hacer alimentos para mascotas de calidad con ingredientes de origen responsable. Es por eso que apoyamos la transición de los agricultores a prácticas agrícolas regenerativas para mejorar la salud del suelo con una inversión global de $30 millones.
Cómo nuestra inversión apoya la transición de los agricultores a la agricultura regenerativa
Invertimos para apoyar a los agricultores de maíz y trigo en Iowa, Indiana, Illinois y Minnesota en su transición a prácticas agrícolas regenerativas como cultivos de cobertura, sin/poca labranza, rotación de cultivos, gestión de nutrientes y control de la erosión del suelo.
También apoyamos a los agricultores de arroz en Arkansas y Misuri con una inversión de más de $6.8 millones para su transición a prácticas agrícolas regenerativas como humedecimiento y secado alternados (AWD), labranza de conservación y rotación de cultivos.
En Europa, apoyamos a los agricultores de trigo en el Reino Unido y a los agricultores de maíz y trigo en Italia en su transición a prácticas agrícolas regenerativas, que incluyen cultivos de cobertura, labranza reducida y plantación de setos. En 2024, comenzamos a colaborar con los agricultores de Polonia y Hungría para extender nuestras prácticas agrícolas regenerativas a más países europeos.
Planes de expansión
A medida que aprendemos, iremos aumentando nuestra inversión y nos expandiremos a otras regiones. En 2024, apoyaremos programas de agricultura regenerativa en América Latina. En 2025, invertiremos en este tipo de programas en Asia y Oceanía.
¿Qué es la agricultura regenerativa?
La agricultura regenerativa es un enfoque holístico de la agricultura que tiene como objetivo mejorar la salud y la fertilidad del suelo mediante la restauración de la materia orgánica del suelo. En definitiva, esto puede ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, ya que fomenta la captura de carbono. Las prácticas agrícolas regenerativas como los cultivos de cobertura, la siembra directa y la agrosilvicultura brindan al agricultor y al ecosistema muchos beneficios, entre los que se incluyen los siguientes:
- Mejor retención del agua en el suelo
- Mayor captura de carbono (GEI)
- Aumento de la biodiversidad