¿Pueden los perros comer limas?
Las limas son una fruta maravillosamente versátil y los seres humanos usan casi todas sus partes, desde la pulpa hasta la cáscara. Además, las limas contienen mucha vitamina C, refuerzan el sistema inmunitario y pueden ayudar a aumentar la absorción de hierro y promover una piel saludable.
Teniendo en cuenta todos estos beneficios que las limas tienen en los humanos, es posible que te hayas preguntado si los perros pueden comer limas y si pueden experimentar los efectos positivos de comerlas. Sigue leyendo para descubrir todo lo que necesitas saber.
¿Pueden los perros comer limas?
Lo mejor es no darle limas a tu perro, ya que la piel es muy ácida y puede causar molestias estomacales. Además, la cáscara contiene aceites y otras sustancias químicas que pueden causar problemas graves en el tracto digestivo. Aparte de su toxicidad, las semillas y la cáscara también pueden suponer un peligro de asfixia para los perros y, si se ingiere, la cáscara puede causar una obstrucción intestinal. A la mayoría de los perros no les agrada el sabor de las limas, por lo que tenderán a evitar comerlas de todos modos.
¿Por qué las limas son tan perjudiciales para los perros?
Las limas contienen aceites esenciales, como limoneno y linalool, que son tóxicos para los perros, además de compuestos fototóxicos llamados psoralenos. Es poco probable que ingerir una pequeña cantidad de lima cause daños graves aparte de malestar gastrointestinal, pero el consumo de grandes cantidades de fruta, en especial la cáscara, podría ser grave. Además, los árboles de lima producen los compuestos fototóxicos, psoralenos, así como también linalool y limoneno. Entonces, si tienes una planta creciendo en tu jardín, debes asegurarte de que tu perro no se frote contra ella ni muerda las hojas o la corteza.
Síntomas de intoxicación por lima
Es muy poco probable que los perros coman limas voluntariamente, ya que el sabor amargo y fuerte que proviene de las frutas cítricas tiende a desagradarles, pero aun así, debes tomar medidas para mantener las limas fuera del alcance de los perros curiosos. Si tu mascota come limón y muestra alguno de los siguientes síntomas, llévala al veterinario lo antes posible:
- Vómitos
- Sensibilidad a la luz
- Diarrea
- Falta de apetito
- Presión arterial baja (debilidad, encías pálidas)
- Pérdida de la coordinación
- Aumento de la sed
- Encías o piel ictéricas (amarillas)
Si tu perro se frotó contra un árbol de lima o su piel entró en contacto con aceite de lima, también podría mostrar signos de irritación en la piel.