¿Qué es un gato de terapia y qué hacen?
Los gatos de terapia son mascotas certificadas que pueden ayudar a las personas a lidiar con la ansiedad, enfermedades y trastornos.
Si tienes un compañero felino en casa, puede que no te sorprenda saber que los gatos se usan de esta manera. Ya sea que te estén abrazando o frotándose para recibir un premio, solo pasar unos minutos con un gato puede reducir el estrés.
Esta experiencia se correlaciona con investigaciones en las que se demuestra que interactuar con felinos puede tener efectos positivos en nuestra salud mental y emocional*. (Su impacto en los niños también puede ser notable).
Si deseas obtener más información sobre gatos como animales de terapia, incluso dónde registrar a tu mascota como una, sigue leyendo.
¿Los gatos pueden ser animales de terapia?
Sí, los gatos pueden ser animales de terapia. Al igual que los perros, los caballos y otros animales, pasar tiempo con un gato puede ser una forma eficaz de terapia asistida por animales.
Con este tipo de terapia, las personas que se enfrentan a un problema de salud o trastorno mental interactúan con un animal (en un entorno supervisado) como parte de su proceso de tratamiento.
Los gatos pueden ser atractivos como animales de terapia para las personas a las que no les gustan los perros. También puede ser una buena opción para los pacientes con movilidad limitada, ya que a muchos les gusta acurrucarse en el regazo de la gente.
Los felinos también tienen fama de ser quisquillosos con las personas con las que se relacionan. Para algunas personas, el abrazo con un gato de terapia puede reforzar un sentido de autoestima.
¿Qué es un gato de terapia?
Aunque muchos felinos pueden calmar, los gatos de terapia están entrenados para realizar trabajos terapéuticos, lo que puede incluir el uso de sus instintos naturales para proporcionar consuelo.
Por lo general, los gatos terapéuticos son mansos y sociables. La calma también es importante, ya que interactúan con diferentes tipos de personas en diferentes entornos. Los felinos que se sobresaltan con facilidad o reaccionan a olores o ruidos pueden no ser ideales para el trabajo.
Para evitar la propagación de infecciones, estos gatos deben estar sanos y bien cuidados. Una piel y un pelaje limpios y las uñas cortadas son importantes no solo para el aspecto, sino también para la seguridad de los pacientes.
¿Qué ocurre en la terapia con animales felinos?
Durante la terapia con felinos, el adiestrador de la mascota los lleva a un destino para reunirse con los pacientes.
Los lugares habituales de terapia con mascotas incluyen residencias para ancianos, hospitales, universidades, penitenciarios y más.
Las actividades varían, pero pueden incluir acariciar, abrazar, asear y jugar con el gato de terapia.
¿Los gatos son buenos animales de terapia?
Sí, los gatos pueden ser excelentes animales de terapia. El tratamiento asistido por felinos tuvo efectos positivos en pacientes con numerosas enfermedades, como artritis, autismo, SIDA, TDAH, diabetes, esclerosis múltiple y más.
Entre algunos de los beneficios de la terapia con gatos se incluyen los siguientes:
- Ayuda con la depresión. La interacción con un animal de terapia como un gato puede desencadenar la liberación de endorfinas en nuestro cuerpo, lo que crea una sensación de bienestar.
- Disminución del aislamiento. El tiempo con un gato de terapia puede proporcionar compañía, lo que alivia la soledad, en especial entre adultos mayores.
- Alivio de la demencia. Los pacientes con Alzheimer pueden presentar disminuciones en la depresión y la agitación y un aumento de la relajación durante las actividades asistidas por animales.
- Salud cardiovascular. Se demostró que los gatos de terapia reducen la presión arterial y, después de una exposición prolongada, protegen contra las cardiopatías.
¿Los gatos pueden ser animales de apoyo?
Sí, los gatos pueden ser animales de apoyo, pero un gato de apoyo emocional es diferente de un gato de terapia. El primero ayuda a reducir el estrés y la ansiedad en su dueño, pero no recibió ningún adiestramiento formal como animal de apoyo.
Los gatos de terapia recibieron adiestramiento y socialización para brindar consuelo y apoyo. A menudo, las instalaciones que participan en terapia asistida por animales requieren la certificación de los animales y el seguro de responsabilidad civil.
¿Puedo registrar a mi gato como animal de terapia?
Si crees que tu gato puede ser un buen animal terapia, existen organizaciones que ofrecen capacitación y evaluación para la certificación, como Pet Partners. Recuerda que, como su encargado, también formas parte del equipo de terapia.
¿Tienes más preguntas sobre el impacto de los gatos en nuestras vidas? Visita nuestra página con información para obtener más consejos de nuestros expertos en mascotas.
* Case, L. P. (2003). Beneficios de vivir con gatos. En The Cat: Its Behavior, Nutrition & Health (págs. 103-105). Blackwell Publishing.